Joan Ramon Laporte, catedrático de la Universidad Autónoma de Barcelona experto en farmacovigilancia.

El reconocido médico y profesor de Farmacología de la Universitat Autònoma de Barcelona, Joan-Ramon Laporte, ha arrojado luz sobre la problemática de la comercialización de la salud en una reciente entrevista con Ricard Ustrell para el programa de radio ‘El matí de Catalunya Ràdio’. Estas revelaciones se producen a raíz de la publicación de su libro ‘Crónica de una sociedad intoxicada’, en el cual critica fuertemente cómo el control de la sanidad ha sido cedido a las empresas farmacéuticas.

Laporte sostiene que existe una tendencia preocupante a prescribir tratamientos para síntomas que en realidad no son enfermedades. El colesterol es uno de los ejemplos más destacados que menciona. El profesor argumenta que el monitoreo del colesterol no solo no requiere medicación en muchos casos, sino que este lípido puede ser beneficioso para la salud, especialmente en personas mayores. Su afirmación desafía la creencia comúnmente aceptada de la existencia de colesterol bueno y malo.

Apoyándose en la evidencia empírica de 16 informes científicos que abarcan más de tres millones de personas, Laporte ofrece una perspectiva sorprendente sobre el riesgo de enfermedades. Según él, los estudios demuestran que las personas mayores de 60 o 65 años con niveles más altos de colesterol tienden a vivir más, tienen menos alzhéimer, menos cáncer y, sorprendentemente, también tienen menos infartos de miocardio y menos ictus.

El experto de 72 años también explica los diversos roles del colesterol en el cuerpo humano. Según Laporte, el colesterol es fundamental para proteger las vainas de mielina de nuestras neuronas. Además, es a partir del colesterol que se sintetizan las hormonas sexuales, los corticoides y las sales biliares que nos ayudan a absorber las grasas de la dieta.

Laporte también cuestiona el papel de las empresas farmacéuticas y las sociedades de cardiología en la promoción de la idea del colesterol bueno y malo. Critica a estos grupos por su influencia en la creación de esta creencia popular. Asimismo, Laporte sostiene que la Organización Mundial del Comercio ejerce un poder mayor que la Organización Mundial de la Salud, y acusa a las patentes farmacéuticas de violar los derechos humanos.

Esta no es la primera vez que Laporte desafía las normas establecidas por las instituciones y organizaciones sanitarias. En 2022, el experto en farmacovigilancia tachó el proceso de vacunación contra el coronavirus como un «experimento global». En aquel momento, afirmó que no estaba demostrado que las dosis de la vacuna realmente salvaran vidas durante su intervención en el Congreso de los Diputados.

En su lucha por la transparencia y la ética en la atención sanitaria, Laporte continúa cuestionando las prácticas actuales y desafiando la influencia de las empresas farmacéuticas en la medicina moderna. Estas revelaciones subrayan la necesidad de un escrutinio más detenido de nuestra comprensión y manejo de la salud y el bienestar.