La Alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, Asegura que la Alianza PP-Vox en el Ayuntamiento no Está en Riesgo
La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, sostuvo el día de ayer que la coalición entre el Partido Popular (PP) y Vox en el Ayuntamiento se mantiene sólida, a pesar de la reciente controversia en torno a los empadronamientos ilegales. Ayala describió las diferencias como un «desacuerdo puntual» con su socio de gobierno, minimizando así su posible impacto en la estabilidad de la administración.
Esta declaración sigue a los comentarios del vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, quien a través de su cuenta de ‘X’, recordó a Ayala que su posición como alcaldesa se debe en gran parte al apoyo de Vox, y que los votos de este partido «no son gratis». La alcaldesa respondió a estos comentarios diciendo: «Si Gallardo tiene algo que decir, que lo diga, pero el bipartito no está en riesgo».
El debate surge a raíz de una propuesta presentada por el vicealcalde, Fernando Martínez-Acitores, y el edil de Seguridad Ciudadana, Ignacio Peña, ambos miembros de Vox. La propuesta incluye «inspecciones periódicas» y «visitas domiciliarias» para verificar la veracidad de la información y «detectar posibles casos de empadronamiento ilegal», así como la apertura de un canal de «denuncias anónimas» para ciudadanos que observen este tipo de irregularidad.
Desacuerdo Puntual
El Grupo Municipal Popular y la propia alcaldesa han criticado esta propuesta, tildándola de «electoralista». Según ellos, la propuesta surge de Vox y debía ser tratada en el pasado pleno, pero se descartó por falta de tiempo, ya que no se consideró un tema urgente. Ayala también expresó su «desacuerdo» con algunas de las medidas presentadas por los ediles de Vox.
Ayala aclaró que, según la Ley de Coordinación de Policías Locales y la Ley de Bases de Régimen Local, «la alcaldesa es la máxima autoridad con capacidad para dar instrucciones a la Policía Local». Asimismo, negó «categóricamente» haber dado luz verde al vicealcalde en este asunto, contradiciendo las insinuaciones de este último.
«No hay riesgo alguno», dijo Ayala, «hay cosas en las que no estamos de acuerdo, pero no están en peligro la coalición». La alcaldesa hizo estas declaraciones antes de asistir a la celebración de la festividad del Curpillos, que se llevó a cabo en el Monasterio de Las Huelgas.
Ayala aseguró que este desacuerdo será manejado internamente, «como se deben manejar estas cuestiones». También dijo que, durante la jira del Parral, que este año se realiza en el paseo de La Quinta, compartirá unos pinchos con el vicealcalde, su equipo de gobierno, y con cualquier burgalés que desee unirse. «A pesar de las diferencias, seguimos siendo un equipo de gobierno», concluyó.
El PSOE ha aprovechado esta situación para criticar a la administración. Luis Tudanca, secretario regional del partido, dijo que la principal preocupación del PP son las advertencias de García-Gallardo sobre el apoyo de Vox. Tudanca criticó los «comportamientos abiertamente racistas» de Vox y animó a Ayala a «reflexionar» sobre su alianza con este partido. Según Tudanca, Ayala puede gobernar «en minoría, como ya lo hice yo» o como lo hizo Javier Lacalle, anterior alcalde del PP.