Un hombre de 43 años, residente en El Puerto de Santa María, Cádiz, ha sido perdonado de una deuda de 2,7 millones de euros por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de la localidad. Para proteger su identidad, le llamaremos Antonio. Esta decisión judicial se ha tomado bajo la figura de la ‘segunda oportunidad’, una normativa que desde 2015 permite exonerar total o parcialmente las deudas a personas de buena fe que reúnan ciertos requisitos.
La historia de Antonio es un claro ejemplo de cómo la vida puede dar un giro inesperado. Antonio, un gaditano que no llegó a terminar sus estudios, se encontró con una deuda de casi tres millones de euros tras la quiebra de sus empresas. Un fondo de inversión compró su deuda y, desde 2008, Antonio vivía con sus saldos bancarios embargados y sin poder tener teléfono móvil por las constantes llamadas del fondo exigiendo el pago.
La situación de Antonio era desesperada, como afirma su abogado, «ni en cien vidas hubiera podido pagar esa deuda». Pero gracias a la figura de la ‘segunda oportunidad’, Antonio ha podido empezar de cero. Este mecanismo jurídico, que lleva en vigencia desde 2015, permite a personas físicas y autónomos que hayan actuado de buena fe, liberarse de las deudas que no pueden pagar.
Para acogerse a este mecanismo, es necesario cumplir una serie de requisitos. El deudor debe demostrar que ha actuado de buena fe, que no ha sido condenado por delitos socioeconómicos en los últimos diez años, que ha intentado un acuerdo extrajudicial de pagos y que sus deudas no superan los cinco millones de euros. Además, debe haber satisfecho los créditos contra la masa y los créditos privilegiados, o al menos estar comprometido a hacerlo en un plan de pagos a cinco años.
En el caso de Antonio, tras cumplir con todos estos requisitos y con el apoyo de su letrado, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de El Puerto de Santa María tomó la decisión de exonerar su deuda de 2,7 millones de euros. Una decisión que, según su letrado, le ha dado una ‘segunda oportunidad’ para rehacer su vida.
El caso de Antonio es uno de los muchos que se han beneficiado de esta normativa en los últimos años. Según datos del Consejo General del Poder Judicial, en 2019 se presentaron en España 10.249 solicitudes de exoneración de deuda bajo la ley de segunda oportunidad, lo que supone un incremento del 37,7% respecto al año anterior.
Aunque esta normativa ha sido de gran ayuda para muchos, todavía hay quienes critican su falta de difusión y la complejidad del procedimiento. Algunos expertos argumentan que, a pesar de las casi 11.000 solicitudes presentadas en 2019, esta cifra sigue siendo muy baja en comparación con los más de 3,5 millones de hogares españoles que se encuentran en situación de sobreendeudamiento.
En resumen, la ‘segunda oportunidad’ es un mecanismo fundamental para ayudar a aquellos que, como Antonio, se encuentran atrapados en una espiral de deuda de la que no pueden salir. Es un salvavidas jurídico que, aunque aún desconocido para muchos, está dando una nueva oportunidad a miles de personas en España.