En medio de las dudas iniciales, Carlos Alcaraz ha demostrado su valía en el Roland Garros, transformando su juego y aumentando su autoestima en cada ronda. Las primeras semanas de entrenamiento fueron positivas, y una vez que el torneo comenzó, Alcaraz demostró su habilidad y resistencia, a pesar de algunos altibajos en las primeras rondas contra competidores como JJ Wolf y Jesper de Jong.
Alcaraz ha demostrado progresivamente su confianza y agresividad en el torneo, superando a rivales como Aliassime, Korda y Tsitsipas, a pesar de que los fantasmas de una lesión del músculo pronador lo rondaban desde finales de marzo. Sin embargo, el jugador murciano se mantuvo firme y sólido, respondiendo con solvencia a todas las propuestas rivales.
El desafío de Alcaraz: enfrentarse a los mejores
Alcaraz se enfrenta ahora a uno de los retos más difíciles de su carrera. A pesar de admitir sentir nervios, el murciano se mantiene humilde y realista sobre su próximo partido. «No me considero favorito ante él. Es uno de los más retos más difíciles del tenis, es uno de los mejores jugadores ahora mismo. Y es número 1», admite Alcaraz.
Alcaraz sabe que su próximo encuentro será una batalla y está preparado para ello. A lo largo de su carrera, ha demostrado una habilidad excepcional para adaptarse y encontrar soluciones en situaciones difíciles. «Es el reto más difícil, pero me encantan estos retos. Los partidos que hemos tenido han sido grandes batallas y me encanta encontrar soluciones», afirma Alcaraz.
Alcaraz también reconoce la importancia de tener rivales fuertes como Jannik en el circuito. «Gracias a él me hace ser mejor jugador, levantarme para mejorar y subir mi nivel para vencerlo», dice Alcaraz, agradecido por la competencia que le brinda su rival. Su deseo es continuar peleando con él en los próximos diez o quince años.
El murciano ha demostrado una gran admiración por su rival, reconociendo su mejora mental como un factor clave en su éxito. «Ya era un gran jugador. Quizá un poco irregular, me atrevo a decir, y ha conseguido esa regularidad sin ninguna duda», analiza Alcaraz.
Hasta ahora, Alcaraz y Sinner han tenido ocho partidos de altísima intensidad, con cuatro victorias para cada uno. El último encuentro entre ambos resultó en una victoria para Alcaraz en la semifinal del pasado Masters 1.000 de Indian Wells.
Preparación para la gran semifinal
Para prepararse para la gran semifinal, Alcaraz ha cambiado su estrategia de entrenamiento en comparación con el año pasado. Este año, el murciano se ha centrado en mantenerse activo en los días entre partidos, entrenando tanto en el club Jean Bouin como en las pistas del recinto oficial.
Además de su entrenamiento físico, Alcaraz también ha implementado estrategias para su bienestar mental, como la «vitamina N», que consiste en visitar parques y zonas verdes para recargarse de energía. Este tipo de actividades, como su reciente excursión a Versalles, le proporcionan la desconexión y la relajación necesarias para enfrentar los retos del torneo.
Estas actividades de ocio, combinadas con su intensivo entrenamiento, demuestran el compromiso de Alcaraz con su preparación física y mental para la gran semifinal. Con su espíritu ganador y su dedicación al entrenamiento, Alcaraz está listo para afrontar cualquier desafío que se le presente en el Roland Garros.