El PSOE propone ahora rebajar el límite de viviendas turísticas del 10 al 2,5 por ciento en toda Sevilla

El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Sevilla, liderado por Francisco Javier Páez, ha expresado su confianza en que el gobierno de José Luis Sanz presente en su próxima reunión los informes jurídicos necesarios para regular las viviendas turísticas en la ciudad. La clave de la discusión radica en la posibilidad de suspender totalmente nuevos registros de apartamentos turísticos, así como las licencias de obras y cambios de uso de viviendas residenciales a turísticas, una propuesta que fue introducida por el PSOE en su primera reunión.

Si los informes jurídicos indican que la suspensión total no es posible, el PSOE ha preparado una alternativa que, de hecho, supone la misma estrategia: no permitir que se abra ni una sola vivienda turística más en la ciudad. Esta propuesta se contrapone a la inicial del equipo de Sanz, que contemplaba la apertura de 23.305 nuevas viviendas turísticas, una cifra que fue rechazada por la mayoría absoluta del Pleno municipal.

Una alternativa para limitar el crecimiento incontrolado del turismo residencial

La alternativa del PSOE no solo impediría más registros de viviendas turísticas, sino que también proporcionaría cobertura para la suspensión total de las licencias de obras o cambios de uso de vivienda residencial a turística. Además, esta medida podría incluso implicar una disminución de este tipo de alojamientos en los barrios más saturados, como el Casco Antiguo y Triana. Esta acción contribuiría a evitar una mayor presión de las viviendas turísticas sobre los precios de los alquileres residenciales, así como a aliviar los problemas de convivencia.

Francisco Javier Páez ha expresado que la propuesta de Sanz permitiría un incremento significativo de viviendas turísticas en toda la ciudad, incluyendo algunos barrios del Casco Antiguo y del conjunto histórico de Triana. Esto, a su vez, derivaría el problema a barrios limítrofes como Cruz Roja, Miraflores, Carretera de Carmona, Tardón, Santa Cecilia, San Gonzalo, La Florida o San Roque.

En comparación con el límite del 10 por ciento de viviendas de uso turístico con respecto al total de viviendas residenciales disponibles por barrios, la propuesta del PSOE plantea reducir ese porcentaje al 2,5 por ciento y aplicarlo a nivel de toda la ciudad. Con esta doble aplicación, se estaría en un escenario donde no cabe ni un piso turístico más en la ciudad, sino que sobrarían 995.

Para hacer cumplir esta normativa, se podría iniciar una amplia campaña de inspección, especialmente en el Casco Antiguo y Triana, sobre todas aquellas viviendas turísticas que se registraron e iniciaron su actividad con posterioridad a la entrada en vigor de la restricción urbanística aprobada en el mandato municipal anterior. Esta restricción equiparaba las exigencias urbanísticas de los pisos turísticos a las que tienen los establecimientos hoteleros y apartamentos turísticos.

En 2022, se aprobó una modificación del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) que cambió la calificación de las viviendas con fines turísticos, regulándolas, al igual que el resto de los alojamientos para turistas, como servicio terciario de hospedaje y no como de uso residencial. Esta variación suponía que esas viviendas se asimilan a hoteles, hostales, pensiones y apartamentos turísticos y, por tanto, tendrán idénticas condiciones y requisitos para su implantación en la ciudad.

Francisco Javier Páez concluyó reiterando su esperanza de que el gobierno de José Luis Sanz acuda a la próxima reunión con una voluntad real de negociar y de abrirse a las propuestas de la oposición. «No cabe ni una vivienda turística más y con la propuesta de su gobierno caben 23.305 más. Nosotros le buscamos fórmulas para una suspensión total. De Sanz depende atajar realmente la proliferación de los pisos turísticos en la ciudad o que se prolongue, agravando así el problema», concluyó Francisco Javier Páez.