El petróleo cotiza con caídas este miércoles, próximas al 1%, que dejan el valor del West Texas Intermediate en los 75,74 dólares americanos por barril, al tiempo que el Brent, de referencia en Europa, se cambia por 82,25 dólares estadounidenses. El miedo a una menor demanda y a una Reserva Federal mucho más dura en su pelea contra la inflación, lo que implicaría mayores subidas de géneros de interés, están lastrando los costes del crudo.
«El petróleo todavía se siente pesado en tanto que los mercaderes de energía adelantan que una Fed de línea dura contemplará mayores incrementos de tasas que probablemente van a llevar a la economía estadounidense a una recesión«, dice Edward Moya, analista senior de Oanda.
Además de esto, cree que «los mercaderes de energía no solo deben sostenerse cada día con los últimos impulsores de la oferta y la demanda, sino más bien asimismo con cuánto podría volver como estaba el dólar dada la trayectoria de ajuste de la Reserva Federal«.
«Probablemente el petróleo prosiga pesado, puesto que los inventarios están altos, el cuidado de la refinería está aquí y por las intranquilidades sobre el desarrollo global«, añade.
La evolución de los costos del petróleo va a depender en buena medida de la política monetaria de la Fed, y en este sentido los mercados van a tener el día de hoy una cita clave con la publicación de las actas del último cónclave capital del banco central estadounidense.
Además de esto, el presidente de la Fed de Saint Louis, James Bullard, ha señalado en una entrevista concedida a ‘CNBC’ que los mercados «tienen la posibilidad de estar sobrevalorando» el peligro de recesión para la economía estadounidense en 2023. El banquero central ha reconocido que los últimos datos macro están exponiendo que la economía estadounidense «es mucho más fuerte de lo que pensábamos» y eso debería motivar una posición mucho más rigurosa por la parte del banco central. «La Fed deberá ir alén del 5% para supervisar la inflación«, ha sentenciado.
Bullard, entre los integrantes mucho más duros de la Fed, asimismo aseguró que al banco central le queda «un trecho por recorrer» y solo «debería frenar cuando haya alcanzado la tasa terminal».