Pastizales y praderas naturales del planeta, en peligro

La ONU alerta sobre la degradación de los pastizales: una amenaza para la supervivencia de miles de millones de personas

Un reciente informe publicado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) arroja luz sobre un problema ambiental creciente: la degradación de los pastizales. Estos espacios, que se extienden por la mayor parte del planeta, están siendo amenazados por la sobreexplotación, el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad, poniendo en riesgo el suministro de alimentos y la supervivencia de miles de millones de personas.

Los pastizales, que comprenden praderas naturales y otros tipos de tierras de pastoreo, desempeñan un papel fundamental en el sustento de la humanidad. Sin embargo, hasta el 50% de estos espacios están degradados, según el informe temático Perspectivas Mundiales de la Tierra sobre pastizales y pastores, presentado por la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD) en Ulán Bator, Mongolia.

¿Qué son los pastizales y por qué son tan importantes?

Los pastizales son praderas naturales que son utilizadas por el ganado y la fauna silvestre como fuente de alimento. Estas tierras también abarcan otros ecosistemas como sabanas, matorrales, humedales, tundras e incluso desiertos. En conjunto, los pastizales cubren el 54% de la superficie terrestre, proporcionan una sexta parte de la producción mundial de alimentos y albergan casi un tercio de las reservas de carbono del planeta.

“La tala de un bosque o de un árbol de 100 años evoca una respuesta emocional en muchos de nosotros. Sin embargo, la transformación de antiguos pastizales es algo que ocurre en silencio y genera una escasa reacción pública”, señaló Ibrahim Thiaw, Secretario Ejecutivo de la CNULD.

Alrededor de 2.000 millones de personas en el mundo, muchos de ellos pequeños pastores, ganaderos y agricultores que enfrentan situaciones de marginación y pobreza, dependen de los pastizales para subsistir.

Conversión de pastizales en tierras de cultivo: una paradoja

El documento señala que la degradación de los pastizales se debe principalmente a la conversión de estos en tierras de cultivo, un proceso impulsado por el crecimiento demográfico, la urbanización, el aumento de la demanda de alimentos, fibras y combustibles, y el pastoreo excesivo. Sin embargo, este cambio de uso de la tierra ha resultado en una paradoja: la conversión de pastizales en cultivos para aumentar la seguridad alimentaria ha causado la degradación de las tierras y la pérdida de los rendimientos agrícolas.

En este sentido, el informe advierte de la necesidad de proteger el pastoreo, un modo de vida móvil ancestral centrado en la cría de ganado a partir de pastos. «El pastoreo, que es a menudo la opción más sostenible, debería incorporarse por defecto a la planificación del uso de los pastizales en todo el mundo, desde los trópicos hasta el Ártico», ha señalado Thiaw.

Además, los expertos recomiendan aumentar la materia orgánica del suelo para proteger los pastizales y garantizar la producción de alimentos ricos en nutrientes. Praveena Sridhar, del movimiento Save Soil, afirmó: «Las prácticas agrícolas regenerativas que aumentan la materia orgánica de nuestros suelos pueden restaurar muchos de nuestros pastizales y garantizar que las tierras de cultivo ya existentes puedan producir alimentos más ricos en nutrientes para la creciente población mundial, sin tener que ampliarlas aún más».

En definitiva, la degradación de los pastizales supone un serio desafío para la sostenibilidad del planeta y la supervivencia de la humanidad. Por ello, la necesidad de proteger estos ecosistemas y promover prácticas agrícolas sostenibles es más urgente que nunca.